La mujer de la grabación hace una pausa. Su voz ha comenzado a quebrarse. Intenta enunciar las palabras que concentran el pavor y el desconcierto que se apodera de su cuerpo: "Entonces te despiertas y sigues teniendo cáncer". La mujer de la grabación soy yo, Mariana Gándara, el 12 de noviembre del 2021, veinticuatro horas después de haber recibido un diagnóstico tan inesperado como lapidario: cáncer de colon avanzado. Cinco segundos después la mujer de la grabación ríe a carcajadas porque se da cuenta que no sabe bien a bien qué es el colon. 

Todo lo vivo tiene fecha de caducidad es un proyecto dramatúrgico de escritura participativa compuesto por una trilogía de obras de teatro y una bitácora de trabajo. Su punto de partida es la experiencia vital de enfrentarse a la cercanía de la muerte, diferenciando cada texto dramático a partir de tres niveles distintos de enunciación: el yo de la dramaturga, el nosotros de una colectividad específica y el ustedes de quienes leen y terminan por escribir su propia versión de la obra.